Hablemos de tubos. Ese momento especial con el que todos los surfistas soñamos y pocos logran saborear. El tiempo se detiene, la luz desaparece y te encuentras inmerso en un instante donde solo existe una posible salida.
Es realmente complicado describir con palabras la sensación de ir volando por un tubo. Desafortunadamente, si quieres saber qué se siente, no te queda más remedio que intentarlo una y otra vez hasta que lo consigas.
En esta entrada, quiero hablaros sobre las cosas que hay que tener en cuenta a la hora de entubar con tablas de softboard.
Lo primero que debes saber es que, por lo general, las tablas de soft tienen más volumen que una tabla de fibra. Esto es crucial a la hora de encarar el tubo. Para enganchar bien el raíl, tendrás que reducir la velocidad y entrar más despacio que con una tabla de fibra.
Una de las grandes ventajas de entubar con softboards es que, si te caes (algo muy común cuando intentas entrar en el tubo), la tabla de soft será más amigable que una tabla de fibra. Si te golpeas, el daño será mucho menor.
Además, la estabilidad será tu gran aliada al navegar por la cueva. El volumen adicional te proporciona un equilibrio perfecto para que puedas gozar esos segundos.
Por último, es vital tener en cuenta que las tablas de soft son, por lo general, menos reactivas que las tablas de fibra. Anticiparte adecuadamente a la ola y dirigir la tabla correctamente hacia la pared será clave en esta maniobra.
Dicho esto, los tubos son únicos. No te vuelvas loco si ves que no sale. En esta vida, lo bueno a veces se hace esperar, pero la recompensa de lograrlo se quedará grabada en tu mente con esa sensación única que no sabrás explicar.